La Clase Importa, Entonces y Ahora

Educación de Adultos, Clase Social y las Perspectivas Narrativas Psicosociales y Autobiográficas

Resumen

La clase alguna vez fue importante en la educación de adultos, y todavía lo es en un mundo neoliberal. Pero puede ser difícil definirlo en la fragmentación de la clase trabajadora organizada y la  precarización/manualización de muchas ocupaciones de la clase media. Históricamente, en las sociedades industriales se podía considerar que la clase estaba determinada por las relaciones productivas, mientras que la conciencia de clase era un fenómeno cultural, forjado en parte por los propios trabajadores en luchas educativas y políticas. Pero esas sociedades industriales más antiguas se han fragmentado y una cultura más individualizada y políticas de diversidad han pasado a ocupar un lugar central. La clase como fenómeno vivo puede descuidarse y se pone en primer plano el género, la raza y la sexualidad. No obstante, la clase sigue moldeando las experiencias entre las personas y las percepciones sobre la educación, los niveles de salud física, mental y la esperanza de vida. Y el descuido de la dinámica de clases y la desigualdad social ha sido cuestionado en formas de investigación autobiográfica y autobiográfica de la clase trabajadora. Esto se inspira en el movimiento de mujeres, el giro biográfico/narrativo y los desafíos al abandono del sujeto humano experimentado en los estudios sociales y culturales. La investigación y los escritos abarcan especialmente a mujeres de clase trabajadora en diversos entornos y diálogos intergeneracionales. La clase se cruza aquí con otras opresiones. El trabajo ilumina cómo la educación de adultos requiere una reconceptualización holística como un proceso relacional, encarnado, emocional, narrativo, psicosocial, intelectual e incluso espiritual, en el que la dinámica del reconocimiento de uno mismo/otro, el amor y la noción feminista entregarse a otro son centrales.